MI PROPOSITO
A mis 11 años de edad, perdí a mi padre y desde entonces se convirtió en mi guía espiritual, desde ese entonces empecé a canalizar mensajes de él y de los ángeles de la guarda que Dios me asignó en esta existencia. Tengo una sensibilidad importante, desde muy pequeña sentía, veía y percibía cosas o presencias que nadie más podía percibir. Creí que era mi imaginación y que todo era fruto de mi inocencia por mi corta edad. Con el pasar del tiempo, las vivencias paranormales o psíquicos se fueron volviendo más repetitivas, nunca se lo comente a nadie porque no quería que me señalaran como una persona anormal. Con el pasar del tiempo fui desarrollando dones espirituales, tales como clarividencia, intuición, telepatía, psicometría. Al llegar a mis 18 años la lectura del chocolate, la lectura de las velas, la lectura del cigarrillo interpretar las runas con mis compañeras de universidad se fue convirtiendo en un pasatiempo que día a día me iba fascinando. Luego empecé a sentir los dolores físicos de los demás, se despertó la inclinación hacia el tarot, la astrología, feng Shui, Quiromancia, entender las leyes universales, Yoga, G-nosis, reiki angelical, el despertar de mi conciencia fueron tomando fuerza y quise verificar en mi propia vida toda aquellos conocimientos que había adquirido empíricamente por libros y por diario vivir.
Siempre trabajé de la mano de ángeles y donde me encontraba canalizaba mensajes a las personas que las necesitaban.
A medida que fueron creciendo mis hijos, me pidieron tiempo para ellos y fue ahí donde decidí darle un vuelco total a mi propósito de vida. No fue fácil, fui muy cuestionada por el cambio, por mi familia, algunos amigos y la sociedad en general, a pesar de que tenía mucho miedo, una vocecita dentro de mí siempre me decía: “Tú puedes, no pares, continua”. Deje mi carrera de ingeniera y ahora instruyo a las personas que quieren el despertar de su conciencia, realizo terapias de sanación física, mental y espiritual.
Hoy pongo a disposición muchas de las herramientas que el universo te regala para sanar tu cuerpo físico, mental y espiritual de esta forma puedas ir en búsqueda de tu felicidad. Dile adiós a las enfermedades físicas, adiós a los miedos, es hora de transformar tu vida y brillar por tu luz propia.
Todos traemos un propósito de vida, asignado por tu fecha de nacimiento, lugar y hora; tengo claro que mi propósito es ayudar y servir a otros, generando consciencia por medio de terapias, canalizando mensajes, cursos, meditaciones, retiros y especialmente entregándole a cada uno el amor, la esperanza y la fuerza para tomar decisiones de vida.